Los Spurs están al borde de la eliminación
- Agustín Mónaco
- 21 may 2017
- 2 Min. de lectura

Golden State derrotó 120-108 a San Antonio en el AT&T Center y dejó la serie de las finales de la conferencia Oeste 3-0 a su favor. El Gran partido de Manu Ginóbili no alcanzó para que su equipo pueda imponer la localia y descontar en el global. El bahiense registró 21 puntos, y además se convirtió en el segundo jugador en la historia que marca más de 20 puntos con más de 39 años en una final de conferencia. El primero fue Kareem Abdul-Jabbar. En el conjunto de la Bahía se destacaron Kevin Durant y Stephen Curry con 33P y 21 respectivamente. El próximo partido se jugará el lunes nuevamente en el estadio de San Antonio.

Otra vez los Spurs no pudieron contar con Kawhi Leonard. Sin embargo el conjunto texano mostró una imagen muy diferente a lo visto en el encuentro anterior. Gregg Popovich hizo un planteo inteligente: poner jugadores bajos para tener velocidad a la hora de marcar a los “Splash Brothers” (Curry y Thompson) y compañía, sabiendo que son los mejores tiradores a larga distancia de la liga. Por eso el más destacado del primer cuarto sería JaVale McGee con 11 puntos (de 16 en total). En los Spurs, ante el decepcionante nivel de LaMarcus Aldridge, Ginóbili y ´Patty´ Mills lideraron con 7 tantos cada uno. Además, otro de los destacados sería Stephen Curry, que se transformó en el máximo anotador histórico de Golden State en Playoffs al superar la barrera de las 1776 unidades de Rick Barry. El primer cuarto culminaría 33-29 a favor del local.
Los Spurs volvieron a sufrir la desgracia de perder a un jugador: David Lee debió retirarse del campo de juego en silla de ruedas. El conjunto texano no pudo mantener la misma faceta que en el inicio y los Warriors comenzaron a liderar en el marcador a manos del creciente rendimiento de Kevin Durant, que marcaría ocho tantos en el segundo chico. Otra vez Manu volvía a ser el mejor de San Antonio, jugando como si no tuviera 39 años. Se irían al descanso con Golden State ganando 64-55.
En la segunda parte, Kevin Durant volvería a ser letal frente a uno Spurs que encontraban cada vez menos respuestas para evitar el borde del KO en la serie. El ex Oklahoma City anotó 19 puntos en el tercer cuarto para comenzar a sellar las posibilidades de una remontada por parte de un equipo que no podía contar con su figura ni con el rendimiento esperado de LaMarcus Aldridge, jugador al que le depositaron muchas esperanzas ante las ausencias de Leonard y Parker. El dominio del equipo de la Bahia en cuanto al juego seguiría hasta el final. El partido culminaría 120-108 y con San Antonio al borde del abismo.
El próximo partido será el lunes en AT&T Center. Parece una misión casi imposible que el conjunto texano logre imponerse en el global teniendo tantas ausencias importantes y con jugadores que no rinden lo esperado. Veremos qué pasa.
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